¿Para qué sirve el acondicionador de pelo?

Si crees que por lavarte el pelo con champú ya lo mantienes cuidado, estás muy equivocada. Para tener un cabello fuerte y sano necesitas un acondicionador de pelo, un productor de cuidado capilar más ligero que una mascarilla que proporciona nutrientes que resultan beneficiosos para la salud del cabello.

De esta forma, la función del champú se reduce a eliminar la suciedad del cabello, las células muertas y el sebo o la grasa acumulada en este. Sin embargo, su efecto deja expuesta la capa exterior de la fibra capilar. Y aquí es donde entra en juego el papel del acondicionador, que sella las cutículas y mantiene protegido al pelo frente a agresiones externas.

Funciones de un acondicionador de pelo

Responder a la cuestión de para qué sirve el acondicionador de pelo implica tener en cuenta una serie de aspectos que favorecen el estado del cabello:

• Hidrata: esta característica favorece el brillo y la flexibilidad del pelo, además de evitar que surjan las temidas puntas abiertas, signo de un cabello desgastado.

• Suaviza: ofrece un tacto sedoso.

• Facilita el peinado: además de prevenir la rotura del pelo, también evita los molestos enredos y los consecuentes tirones para deshacerlos.

• Reduce la electricidad estática: ayuda a controlar mejor el cabello, evitando así que se encrespe.

Cómo elegir el mejor acondicionador de pelo

Además de tener en cuenta el formato en que se presentan (champú, crema, aceite o spray, entre otros), hay que valorar el uso que se le da al acondicionador de pelo, factor que a su vez depende de las necesidades que tiene cada tipo de cabello. Por todo ello, estos son los diferentes tipos de acondicionadores que puedes utilizar:

• Acondicionadores diarios: son los más básicos y lo suficientemente ligeros como para utilizarlos todos los días. Ayudan a proteger el cabello, ya sea normal o fino, siempre que te laves el pelo. Además, pueden aclararse con facilidad. Un ejemplo es el acondicionador liso y sedoso de Tresemmé, con proteínas de seda y aceite de argán, que permite tener un cabello más liso y suave a la par que hidratado. Otros, por el contrario, también pueden dar sensación de un mayor volumen o hacer frente a la grasa y a la caspa que genera el pelo, entre otros casos. En Arenal puedes encontrar estos y otras clases de acondicionadores de pelo.

• Acondicionadores profundos: estos penetran de forma más profunda en la fibra capilar. Por eso, resultan especialmente beneficiosos para aquellos cabellos secos, gruesos, castigados o quebradizos que necesitan un efecto reparador. Esto resulta útil para el verano, cuando el pelo queda más expuesto al sol y a los efectos que tienen el mar y la piscina sobre este. Para estos casos, puedes utilizar el spray acondicionador Express Ultimate Oil Elixir de Gliss, con keratina incluida, que nutre y refuerza el pelo. Con todo, los expertos recomiendan utilizar este tipo de acondicionadores al menos una vez a la semana.

• Acondicionadores sin aclarado: este tipo de acondicionadores, disponibles también en formato de loción, no necesitan un aclarado de agua tras ser aplicados. Además, suelen funcionar mejor en cabellos rizados. De esta forma, puedes recurrir a la crema sin aclarado Rizos perfectos de Pantene, que no solo define los rizos en 24 horas, sino que evita el encrespamiento.

• Acondicionadores para cabellos teñidos: en caso de llevar un tinte en el pelo, mechas o una decoloración, se debe utilizar tanto un champú como un acondicionador específico para cabello teñido. Estos ayudan a proteger esta clase de cabello frente a las agresiones externas, además de prolongar la intensidad del color aplicado y su brillo. Un ejemplo es el suavizante Color Vive de Elvive.

Formas de aplicarse un acondicionador de pelo

Tras aprender para qué sirve el acondicionador de pelo, toca hacer lo propio con la forma de utilizarlo.

Primero hay que diferenciar entre aquellos que necesitan aclararse con agua tras ser aplicados y los que no. En caso de necesitarlo, tan solo debe lavarse el pelo con champú y aclararlo después. Una vez hecho esto, es momento de aplicar el acondicionador de pelo:

• Utiliza una pequeña cantidad, del tamaño de una nuez.
• Masajea el cabello de medios a puntas para que absorba bien los nutrientes del acondicionador.
• No lo apliques sobre las raíces.
• Espera unos minutos para que actúe.
• Aclara el pelo con abundante agua tibia o incluso fría para sellar así las cutículas.

En caso de no precisar de aclarado, el acondicionador de pelo se aplica directamente sobre el pelo húmedo, de medias a puntas, utilizando los dedos o un peine con el que ir desenredando el cabello. Por último, se puede optar por secar el pelo o dejarlo al aire.

Ahora que ya sabes para qué sirve el acondicionador de pelo, cuál puedes necesitar y cómo utilizarlo, no olvides recurrir a él para mantener tu cabello sano y fuerte.