Cómo limpiar las juntas del suelo paso a paso

Para mantener el suelo en perfecto estado, limpiar las juntas del suelo es una parte esencial del proceso. Con el paso de los días se va acumulando polvo y suciedad en las juntas, se oscurecen y dan una sensación descuidada a esa zona de casa. Aunque limpiar las juntas del suelo, a priori, parece una tarea tediosa, en este post te damos las claves para que sepas cómo hacerlo y qué limpiador de juntas utilizar. ¡Es más fácil de lo que piensas!

El primer paso será barrer el suelo para eliminar toda la suciedad que podamos. Después, fregaremos con agua y lejía para desinfectar y dejar el suelo lo más preparado posible para los productos específicos que utilizaremos. Si lo que queremos es limpiar las juntas de los azulejos de la cocina o el baño, mezcla también agua caliente y lejía y aplícalo sobre las juntas con un pulverizador, una bayeta o un paño.

Productos para limpiar las juntas del suelo

Hay muchos productos de limpieza que puedes usar para limpiar las juntas de los azulejos o para limpiar las juntas de las baldosas. Elijas cual elijas, utiliza un cepillo para aplicarlos. De esta manera, conseguiremos que el producto penetre más y consiga arrancar más suciedad. ¡Eso sí! Asegúrate de que las cerdas no sean muy duras para evitar arañar el azulejo o su brillo. Especial cuidado también con los suelos cerámicos. Utiliza un limpiador de juntas de cerámica para evitar dañar el material.

Un limpiador de juntas que nos encanta y que sirve tanto para suelos como para paredes, es el limpiador de juntas de la marca Paso, que limpia en profundidad y es capaz de eliminar manchas de grasa, suciedad, incrustaciones y otros agentes.

Otro producto para limpiar las juntas de azulejos, pavimentos o rincones, es el limpiador de juntas de Chubb, que, además, si lo usamos mensualmente previene el ennegrecimiento de las juntas. Pero si las juntas ya están ennegrecidas y después de limpiarlas y quitarles la suciedad quieres blanquearlas hay otros productos que te interesará conocer.

Pero antes de avanzar hasta este paso, tienes que saber que después de usar el producto para limpiar las juntas de los azulejos o las baldosas, deberías fregar otra vez con agua caliente para eliminar los restos de productos y limpiar totalmente la superficie elegida.

Una vez que hayamos fregado de nuevo, ¡es el momento de blanquear! El blanqueador de Rayen es muy fácil y cómodo de aplicar, ya que podemos utilizarlo como un rotulador, y consigue un blanqueamiento total de las juntas de los azulejos y baldosas.

También recomendamos el blanqueador de juntas de Baldosinín. Hay uno con aplicador de esponja, y otro con aplicador pincel. Dependiendo de qué te resulte más cómodo, y cómo sean las juntas de los azulejos a blanquear, será mejor uno u otro.

Por otro lado, si te gustan más los remedios caseros, puedes mezclar bicarbonato, vinagre blanco y agua caliente y utilizarlo como limpiador de juntas. Déjalo actuar unos 15 minutos y retíralo. ¡Con todos estos trucos conseguirás que el suelo y los azulejos de casa luzcan limpios, blancos y como nuevos!