¿Qué es un booster?

Probablemente hayas escuchado hablar de él, pero quizá no sepas diferenciarlo de otros productos o para qué deberías utilizarlo exactamente. El booster facial es ese producto que viene a completar nuestra rutina de belleza y sin el que no podrás vivir desde que sepas qué es un booster y para qué sirve. ¡Atenta! Hoy te desvelamos qué es un booster facial.

¿Qué es un booster?

Si acudimos a su traducción literal, booster significa en inglés potenciador, refuerzo, elevador… Así que ya podemos empezar a intuir un poco qué es un booster facial. Un booster facial es un producto cosmético, un tratamiento que, al estar formulado con diferentes nutrientes (dependiendo de para qué lo vayamos a utilizar tendrá unos activos u otros), actúa como acelerador o activador de belleza.

Suele confundirse con el sérum, pero la realidad es que no son lo mismo. El sérum lo utilizamos para preparar la piel y potenciar el efecto de los cosméticos que vamos a usar posteriormente sobre nuestro rostro. Sin embargo, el booster suele contener activos más potentes y en mayor concentración para conseguir una acción más específica.

¿Cómo se aplica y para qué sirve un booster?

El booster no sustituye a otros cosméticos, sino que los complementa. Por eso es importante aplicarlo con la piel limpia y tonificada antes del sérum y/o la crema facial. O añadirlo a tu crema hidratante. Puedes convertir tu booster facial o en un producto fijo de tu rutina de cuidados facial o utilizarlo como un tratamiento intensivo durante unos meses para tratar un problema específico o cuando nuestra piel necesite un extra de ayuda.

¿Cuándo puede ocurrir eso? En épocas en las que estamos más cansados y nuestra piel del rostro lo refleja, si hemos tenido un brote de acné, tras una época como Navidad o verano en la que hemos comido peor o bebido más alcohol del que deberíamos…

Entonces un booster ¿para qué sirve concretamente? El booster facial sirve como acelerador o activador de belleza; para ayudar a tratar problemas específicos en función de los principios activos seleccionados. Así, puede prevenir las agresiones externas, combatir la flacidez, las pieles grasas o las manchas, iluminar la piel, eliminar toxinas, combatir la rosácea, el acné… Por ello la elección del booster ideal para ti va a depender de las necesidades específicas que quieras conseguir.

Para una piel más tersa, suave y joven te recomendamos Superstart Skin Renewal Booster de Elizabeth Arden, que trabaja en el estrato visible de la piel reforzando su función de protección natural y activando al máximo su potencial de belleza. Para una hidratación intensa e inmediata Eucerin Hyaluron-Filler Moisture Booster consigue refrescar e hidratar la piel, rellenando las líneas de expresión para obtener un aspecto rejuvenecido y saludable.

Para iluminar las pieles más apagadas o estropeadas en épocas de estrés o cansancio Capture Youth Glow Booster Sérum de Dior es ideal porque se encarga de aclarar la tez y eliminar las imperfecciones que afectan a la textura de la piel para conseguir una piel mucho más iluminada y unificada. Para reducir las manchas, corregir las líneas de expresión y las arrugas, y aportar luminosidad Fresh Pressed Daily Booster de Clinique es perfecto como tratamiento antiaging.

Y recuerda que puedes complementar el booster de tu rutina con estuches de cosmética.